NUESTRA HISTORIA
Todo empezó en 2012, cuando Anthony Viaene y sus amigos tuvieron la loca idea de poner en marcha un servicio de reparto ecológico en Gante. Lo llamaron Bubble Post. Se especializaban en entregas de última milla utilizando bicicletas de carga y vehículos eléctricos. La empresa rápidamente ganó impulso, lo que les llevó a buscar un software de reparto de última milla rápido y eficiente para organizar y agilizar sus entregas diarias.
El equipo no encontró nada adecuado en el mercado, así que pensó ¿por qué no tener otra idea loca y desarrollar un sistema propio? Así nació Dropon. Mientras Bubble Post expandía sus operaciones por el Benelux, Dropon funcionaba en segundo plano como una sofisticada y elaborada herramienta para la planificación de rutas.
En 2017, Bpost – la empresa postal belga – adquirió Bubble Post. Tras un periodo de reflexión, Anthony exploró opciones para ampliar la aplicabilidad de Dropon a otras empresas y segmentos de mercado. Fue entonces cuando Anthony invitó a su antiguo compañero de hockey, Jonathan Carette, quien había estado trabajando en el extranjero para BNP Paribas, a unirse a esta nueva aventura. Juntos fundaron una nueva empresa: Dropon.
Pronto, Dropon comenzó a florecer de manera constante hasta convertirse en una empresa consolidada, con clientes de diferentes sectores en Bélgica y los Países Bajos. Su misión es ayudar a las empresas a optimizar sus entregas de última milla y a controlar su planificación y monitoreo de rutas. Sobre todo, sus herramientas de planificación de rutas, inteligentes y fáciles de usar, están diseñadas para garantizar la mejor experiencia de entrega para los clientes.